Nuevos Objetivos

Como muy bien sabemos los que trabajamos en la empresa privada, cada vez se impone más el trabajo por objetivos. (Tema que en la empresa pública no está tan arraigado como debiera, y actualmente tampoco en el sector financiero, pues se quieren nutrir de los presupuestos del estado cuando el resultado de su gestión no es satisfactorio).


Se preguntará mi amigo anónimo si ya estoy hablando de política (¿por qué le parecerá tan malo lo de estar politizado?). Pero no. De lo que quería hablar era de objetivos, pero es que me gusta alardear de la cantidad de gente a la que ayudo a mantener (aunque algunos no lo reconozcan, y en represalia me suban el Euribor).

Volviendo a los objetivos, y desde una perspectiva deportiva, siempre he pensado que correr por correr es tontería, y que acabas amorcillándote si no tienes un objetivo a la vista que te haga perseverar en el esfuerzo. Y si al final no lo alcanzas, siempre te será útil saber el motivo.

Los que me conocéis ya sabéis que soy muy propenso al entrenamiento por objetivos. Me propuse ir al maratón de Zaragoza, y no he ido. Y no es la primera vez que me pasa. Ni la décima. Visto lo cual, he decidido plantearme un nuevo objetivo: el Maratón de San Sebastián. Y ello por dos motivos, primero porque es a finales de Noviembre y seguro que me deja el cuerpo niquelado para soportar los excesos navideños. Y segundo porque es santo y no me puede sentar mal.

Varios compañeros han decidido correrlo, y espero ir a disfrutar con ellos. A los demás os animo a que también os lo preparéis con nosotros. Disfrutaremos juntos del entrenamiento, y si al final no llegamos a participar, la inscripción nos saldrá gratis.

La cuenta atrás ya está en marcha en la cabecera del blog.

Este es el enlace con su página Web.


¡OBJETIVO DONOSTIA!
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Meditación para hoy.

Que conste que en el inicio del post he hablado de empresa pública y sector financiero. No he nombrado para nada a la administración pública. Por lo que ruego a todos nuestros diligentes funcionarios, incluidos Técnicos y Técnicas, Auxiliares Administrativos y Administrativas, Bomberos y Bomberas, Policíos y Policías, Profesores y Profesoras, Jueces y Juezas, Inspectores e Inspectoras de Hacienda, que no se den por aludidos (sobre todo los últimos) y que se abstengan de hacer comentarios.
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Segunda meditación para hoy

Al hilo de la meditación anterior, recuerdo que me comentaba una paisana la suerte que tenemos en Castilla la Mancha al tener sólo cuatro administraciones a las que costear: Ayuntamiento, Diputación, Comunidad y Gobierno Central. Ella en Aragón tiene cinco, ya que con el buen humor que nos caracteriza a los aragoneses, entre el Ayuntamiento y la Diputación hemos metido la Comarca (en algún sitio teníamos que poner a los hobbits). Y me consta que alguna comunidad como Cataluña tiene seis.

Os preguntaréis que a qué viene esto. Pues eso digo yo. ¿A qué viene esto?

Aunque bien pensado, cuantas más administraciones más subvenciones. De ahí el poderío deportivo de una comunidad como Cataluña.

Con lo que se demuestra que al final todo se reduce a política y deporte.

Perdón, quise decir a política y fútbol (cqd).