Lo he puesto en el nuevo foro de la página “club correguada”, al final haciendo clic en lo siguiente podéis ver las fotos que hice en Cabanillas
Atletas Club Marathon Guadalajara En Cabanillas
El lunes me encontré sorprendente bien y por ello corrí una hora. Un poquito sobrado andaba yo, cuando el martes después de hacer cuatro repeticiones de ocho minutos a buen ritmo, a las ocho y media de la noche estaba intentando meterme en la cama. Esto me indico que ando muy justito de fuerzas, esperemos sobrevivir.
Corriendo uno de estos días me acordaba como en cartas al director de un periódico se pide que se deben autorizar los trasvases de agua, pero en mis largas reflexiones durante la carrera, intentaba contestar a esa persona y a mí mismo; si yo pido (utilizo) más de lo que tengo, probablemente debo ser responsable de mi decisión y no implicar a gente que nada tiene que ver con el beneficio que yo quiero obtener cuando yo corro. Cuando crecemos, ganamos dinero, ganamos forma física, somos maravillosos pero cuando vienen las carencias, buscamos que sean los demás quienes nos tienen que proteger. Probablemente, somos una sociedad inmadura que en estas situaciones siempre encuentra apoyo de algunos que beneficiándose sin mojarse, se ofrecen como solución, habiendo casos donde ellos mismos han colaborado en la creación del problema, difícil solución.
Escribo el lunes, 7 de abril con la perspectiva de cuatro días a narrar es por ello, que como me comprometí a poner bien el nombre de Youssef, pues ahí queda puesto a parte de enviarle una gran felicitación por el tercer puesto en la media maratón de Madrid, en la cual me metí como pude y de la cual estoy muy satisfecho, con mi tiempo de 1h23’39’’ que no hubiera podido hacer sin haber ido al lado de Fernando y Javier nuestros dos compañeros de Madrid. El dominio que tienen ellos de la carrera me dio tranquilidad para aprender a regular la carrera.
Ese mismo día, nuestro amigo Javier Escamilla que nos ha transmitido durante estos años la calidez de su humanidad perdía el calor y el apoyo que ha tenido en su madre; nos queda la tranquilidad de saber que tiene sólidas columnas sobre las que seguirá edificando los caminos que irá trazando por la vida.
Esta crónica regresiva me lleva al miércoles, donde dado el cansancio del día anterior aproveche para ir muy despacio y con poco tiempo de trabajo. El jueves, sin embargo el reto era grande tenía que hacer dos series de 25 minutos. Dado mi espíritu de estos tiempos, elegí para realizar una de las series subir la antigua carretera del Sotillo, aunque por desgracia después de esta subida me quedaban otros nueve minutos de serie y esto ya era más duro. Por cierto, me viene a la cabeza la mala redacción del ultimo escrito con continuas repeticiones de palabras. Pude con el entrenamiento pero quedando tocado y preso, espero, de una permanente cansancio: menos mal que el viernes, nuestro ángel de la guardia, Juan Antonio, velo por llevarme tranquilo por los caminos de la recuperación; aún así el sábado, debido a un compromiso con mi anterior mundo de las piraguas, que no me permitió descansar como hubiera querido, me planteé hasta el ultimo momento acudir a la carrera de Madrid, pero bueno el descanso hace virguerías y a las siete de la mañana andaba embarcado en la preparación hacia la gran urbe.
Hoy, lunes, sí estaba cansado; por ello he cabalgado sobre las grupas de mis durezas musculares, sentía tanta rigidez como siento cuando pienso que la riqueza en la que han vivido los grandes magnates y los especuladores me ha oprimido al obligar a la sociedad hacía camino que nos involucran a todos en los gastos pero no así en los beneficios y nos es cuestión de envidia, muchas veces no podemos aspirar a ser lo que no somos, al final las deudas las tenemos que pagar

José Antonio
Atletas Club Marathon Guadalajara En Cabanillas
El lunes me encontré sorprendente bien y por ello corrí una hora. Un poquito sobrado andaba yo, cuando el martes después de hacer cuatro repeticiones de ocho minutos a buen ritmo, a las ocho y media de la noche estaba intentando meterme en la cama. Esto me indico que ando muy justito de fuerzas, esperemos sobrevivir.
Corriendo uno de estos días me acordaba como en cartas al director de un periódico se pide que se deben autorizar los trasvases de agua, pero en mis largas reflexiones durante la carrera, intentaba contestar a esa persona y a mí mismo; si yo pido (utilizo) más de lo que tengo, probablemente debo ser responsable de mi decisión y no implicar a gente que nada tiene que ver con el beneficio que yo quiero obtener cuando yo corro. Cuando crecemos, ganamos dinero, ganamos forma física, somos maravillosos pero cuando vienen las carencias, buscamos que sean los demás quienes nos tienen que proteger. Probablemente, somos una sociedad inmadura que en estas situaciones siempre encuentra apoyo de algunos que beneficiándose sin mojarse, se ofrecen como solución, habiendo casos donde ellos mismos han colaborado en la creación del problema, difícil solución.
Escribo el lunes, 7 de abril con la perspectiva de cuatro días a narrar es por ello, que como me comprometí a poner bien el nombre de Youssef, pues ahí queda puesto a parte de enviarle una gran felicitación por el tercer puesto en la media maratón de Madrid, en la cual me metí como pude y de la cual estoy muy satisfecho, con mi tiempo de 1h23’39’’ que no hubiera podido hacer sin haber ido al lado de Fernando y Javier nuestros dos compañeros de Madrid. El dominio que tienen ellos de la carrera me dio tranquilidad para aprender a regular la carrera.
Ese mismo día, nuestro amigo Javier Escamilla que nos ha transmitido durante estos años la calidez de su humanidad perdía el calor y el apoyo que ha tenido en su madre; nos queda la tranquilidad de saber que tiene sólidas columnas sobre las que seguirá edificando los caminos que irá trazando por la vida.
Esta crónica regresiva me lleva al miércoles, donde dado el cansancio del día anterior aproveche para ir muy despacio y con poco tiempo de trabajo. El jueves, sin embargo el reto era grande tenía que hacer dos series de 25 minutos. Dado mi espíritu de estos tiempos, elegí para realizar una de las series subir la antigua carretera del Sotillo, aunque por desgracia después de esta subida me quedaban otros nueve minutos de serie y esto ya era más duro. Por cierto, me viene a la cabeza la mala redacción del ultimo escrito con continuas repeticiones de palabras. Pude con el entrenamiento pero quedando tocado y preso, espero, de una permanente cansancio: menos mal que el viernes, nuestro ángel de la guardia, Juan Antonio, velo por llevarme tranquilo por los caminos de la recuperación; aún así el sábado, debido a un compromiso con mi anterior mundo de las piraguas, que no me permitió descansar como hubiera querido, me planteé hasta el ultimo momento acudir a la carrera de Madrid, pero bueno el descanso hace virguerías y a las siete de la mañana andaba embarcado en la preparación hacia la gran urbe.
Hoy, lunes, sí estaba cansado; por ello he cabalgado sobre las grupas de mis durezas musculares, sentía tanta rigidez como siento cuando pienso que la riqueza en la que han vivido los grandes magnates y los especuladores me ha oprimido al obligar a la sociedad hacía camino que nos involucran a todos en los gastos pero no así en los beneficios y nos es cuestión de envidia, muchas veces no podemos aspirar a ser lo que no somos, al final las deudas las tenemos que pagar

José Antonio
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