Consejos para Noveles

Me entero por nuestra página Web que Juan Diego Martin, los hermanos Centenera, Juan Antonio y David, Oscar Lopez, Ignacio Hernandez, Dani Jimenez y Julian Duro van a correr este año en Mapoma su primer Maratón. Ya que ayer no pude participar en el entrenamiento, y mientras me llegan noticias del mismo por parte de Florián, me voy a permitir dedicarles unos consejos a todos nuestros maratonianos noveles, dictados por la experiencia, para hacerles sobrellevar de forma menos angustiosa el difícil día de la víspera de la carrera.

El día anterior a la carrera es el mas transcendental de la preparación. Por lo tanto, hay que poner cara de transcendente, que consiste en una mezcla entre cara de tonto y de que te duele algo. Esto hace que tu familia se acojone y soporte más facilmente el cúmulo de tonterías que vas a hacer a continuación.


Ya con la cara apropiada, hay que quejarse mucho, hasta conseguir dar pena. El que los que te rodean se apiaden de ti tiene un efecto sedante muy beneficioso para las lesiones mal curadas, y es un fantástico relajante muscular.

Hay que dar un par de paseos, pero de forma sorpresiva; esto es, cuando toda tu familia está ocupada en sus cosas, es que ha llegado el momento de llevarlos de paseo. Eso denota que se están sacrificando por ti, aumenta tu ego, e inmediatamente empiezas a generar endorfinas, que te van a ser muy beneficiosas el día de la carrera.

Y lo más importante, la comida, hay que comer pasta hasta que te entren ganas de vomitar, pero preparada de forma rara, poco apetitosa, a poder ser asquerosa, para que se note que te la comes porque es tu obligación y porque te estás sacrificando por el honor de los tuyos. Yo, por ejemplo, me la suelo mezclar con una lata de calamares en su tinta, lo que os puedo asegurar que resulta vomitivo.

He dejado para el final lo del agua. Por la tarde, hay que beber entre 4 y 5 litros de agua y bebidas isotónicas. También vienen bien un par de cervecitas con la cena, que relajan mucho. La verdadera finalidad de todo esto no es hidratarte, pues eso lo consigues con 1 o 1,5 litros de agua, sino conseguir estar toda la noche levantándote a mear y tener a toda la familia sin pegar ojo, porque, si tu no puedes dormir por los nervios, de alguna manera tienes que conseguir que los demás tampoco lo hagan.

Y ahora hablando en serio:

Come normal, como has venido comiendo hasta entonces, si acaso con un poco más de hidratos y un poco menos de grasa, y bebe un poco mas de lo normal, hasta que mees transparente. Entonces para. Si te pegas toda la semana comiendo macarrones a la vez que bajas un 70% el volumen de entrenamiento, sólo vas a conseguir engordarte 2 ó 3 kilos, que te van a sentar como una patada en el escroto el día de la carrera.

No hagas caso de regímenes milagrosos superenergéticos. Dan todos diarrea.

Relajate y no pienses que estas haciendo nada especial. Hasta yo he conseguido terminar todos los maratones que he empezado (y van diez). Y como podéis comprobar no me han quedado traumas físicos apreciables. (Los mentales ya los tenía antes de empezar a correr, e incluso me han mejorado). En el peor de ellos, terminé andando desde el kilómetro 35, y cuando estaba totalmente deprimido ya en el 40....... ¡alcancé al Olmo! y terminamos juntos (cantando tonterías y obscenidades) en 4:26.

Y por último, en cuanto llegues a la línea de meta, empieza a preparar el siguiente Maratón. Evitarás tener que comprarte ropa de mayor tallaje.

MUCHA SUERTE A NOVELES Y VETERANOS