"Creí que era una aventura y en realidad era la vida" Joseph Conrad

sábado, 9 de febrero de 2008

La Tapia (Another Brick in the Wall )

Si os preguntara qué es lo que más teméis en una carrera, seguro que aparecerían respuestas de este tipo:

- El Muro, en la última parte de un Maratón.
- Una deshidratación en plena carrera.
- Las lesiones.
- Una crisis cardiaca por sobreesfuerzo.
- Que me gane el Emilio.

Pero he de confesar que no es nada de esto lo que a mi verdaderamente me quita el sueño. En lo más recóndito de mi mente, entre mis miedos atávicos, se encuentra una imágen cuyo sólo nombre hace estremecer todos mis músculos y tendones:

¡ La Tapia de El Pardo!

Todos los que han corrido la Media Maratón de Fuencarral la conocen. Despues de recorrer 11 fantásticos kilómetros, casi todo cuesta abajo,




se entra en El Pardo, subiendo un falso llano,

y allí, al fondo, a la derecha, empieza a asomar ...... la tapia, amenazadora como el hisopo de un obispo en día de manifestación.

Cuando llegas a ella, la vas viendo discurrir a tu derecha, hasta que de improviso termina, y la carretera tuerce a la derecha siguiendo el trazado de la maldita tapia.

Y entonces levantas la vista al cielo y la ves,

la cuesta de la tapia de El Pardo, perdiéndose entre nubes en lo alto, mientra una multitud de cabezas oscilan de lado a lado a la vez que los cuerpos pegados a las mismas se arrastran por las traidoras pendientes.

Terminan las conversaciones, terminan los chistes y la alegre camaradería. Todo se convierte en un enemigo, que tira de ti hacia atrás impidiéndote el ascenso. Cuando la primera cuesta termina y empiezas a recuperarte, viene la segunda,

todavía mas larga y traidora, ya que ésta se esconde entre las curvas, reapareciendo de nuevo cada vez que imaginas haber llegado a la cima.

Y así hasta Fuencarral.




No puedo continuar. Es indescriptible. Los que lo habéis vivido me comprenderéis. Al resto no os queda mas remedio que correrla algún año, para saborear la experiencia. ¡Id, y vivid para contarlo!



1 comentario:

  1. En mi única experiencia de ésta carrera, se me quedó grabada una imagen que no se me olvida. Aproximadamente sobre el final del km. 20, al finalizar el último repecho de la carrera, se veía un semaforo en rojo, al cual no llegaba nunca y que no cambiaba nunca de color.Ésta imagen se me hizo interminable.
    No vuelvo.

    ResponderEliminar